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      SAN JUAN: UN PARAÍSO PARA LOS TURISTAS
      -- Con rigurosa exactitud, el clima de San Juan
      mejora puntualmente a mediados de diciembre, y la temporada de
      lluvias da paso a las secas y brillantes tardes de invierno.
      Hay una luz clara en el cielo de San Juan en esta época
      del año. Una luz que realza el azul del cielo y del mar
      a lo largo de sus playas, que se extienden desde Condado hasta
      el poco desarrollado Piñones, se vuelve iridiscente en
      el Viejo San Juan al rebotar en las fachadas de piedra arenisca
      de las históricas fortalezas y capillas, y se esparce
      en las paredes de las viejas casas, pintadas en tonos pastel... 
      
      Como Procurador General de los EE.UU. durante las
      presidencias de Reagan y Bush, insto al Congreso a auspiciar
      un proceso democrático para resolver el status de Puerto
      Rico, basado en los principios constitucionales que reconocen
      iguales derechos y responsabilidades para todos los ciudadanos,
      y el gobierno con el consenso de los gobernados. Aunque estos
      valores básicos rigieron el proceso por el cual nuestra
      nación resolvió el status de otros 33 grandes y
      populosos territorios desde 1789, en 1998 el Congreso dejó
      una vez más sin resolver la postergada cuestión
      del status de Puerto Rico. 
      Sin embargo, en lugar de preguntarse por qué
      el Congreso todavía no tiene planes para poner fin al
      actual status de limbo político en el que se encuentra
      Puerto Rico, muchos eruditos reaccionaron ante el reciente plebiscito
      realizado bajo la ley local de Puerto Rico mostrando su perplejidad
      por que los partidarios de la estadidad en el territorio no han
      abandonado su causa a pesar de no haber conseguido la mayoría. 
      Por lo tanto, en lugar sentirnos confusos porque
      los líderes de la estadidad en Puerto Rico demandan que
      el Congreso actúe sobre las bases del reciente plebiscito,
      recordemos que América se convirtió en la nación
      más grande de la historia de la humanidad otorgándole
      al pueblo las herramientas para la autodeterminación.
      Tarde o temprano el Congreso tendrá que hacer lo mismo
      con Puerto Rico, y cuanto antes lo haga, mucho mejor para Puerto
      Rico y la nación en su conjunto. -Dick Thornburgh
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            "Sólo el inglés'
            pone de manifiesto la xenofobia
             Austin, Texas - "Con la estadidad no
            nos convertiremos en rubios de ojos azules. Tampoco va a nevar
            en Puerto Rico. Seguiremos siendo como somos... hispanoparlantes
            que comen buñuelos." 
            Este texto, tomado de un comercial que la
            televisión puertorriqueña emitió en septiembre
            del 98, fue concebido para darle seguridad a los residentes del
            ELA de que la estadidad no acabaría con la cultura puertorriqueña.
            Paradójicamente, avisos similares podrían ser necesarios
            en los EE.UU. para convencer a una mayoría paranoica de
            que el creciente número de ciudadanos hispanohablantes
            no traerá como consecuencia el caos económico y
            cultural. 
            El movimiento que busca la aprobación
            legal del uso del inglés como idioma oficial de los EE.UU.
            resulta inútil y, lo que es peor, irritante. Los ciudadanos
            americanos no deberían olvidar que este país ha
            sido siempre una nación de inmigrantes que eventualmente
            aprendieron el inglés; imponer por ley un idioma oficial
            sólo pondría de manifiesto la xenofobia de una
            mayoría que va disminuyendo. 
            [E]l inglés seguirá siendo de
            facto el idioma común elegido por todos debido a su utilidad
            como elemento unificador. No es necesario dictar ninguna legislación
            para que así sea. Los alarmistas que politizan la cuestión
            simplemente ponen de manifiesto una lamentable tendencia en la
            historia americana: un inexplicable temor a los forasteros. -Brian
            Winter, Daily Texan (U. Texas-Austin)
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      San Juan - Mientras los puertorriqueños permanecen divididos
      sobre si van a convertirse o no en un estado de los EE.UU. ,
      la rápida recuperación de la isla del Huracán
      Georges muestra una paradoja: en cuanto a economía se
      trata, Puerto Rico ya es prácticamente un estado. 
      En el largo plazo, Rosselló y otros
      miembros de su partido pro estadidad sueñan con el día
      en que Puerto rico no sólo parezca un estado por su economía,
      sino que efectivamente sea la estrella 51 en la bandera de los
      EE.UU. 
      "La estadidad es una herramienta de desarrollo",
      afirmó el zar económico Vivoni. "No sólo
      porque recibiríamos más fondos federales, sino
      por que la percepción de estabilidad que trae ser un estado.
      La estadidad significaría más negocios e inversiones".
      - Doreen Hemlock, SUN-SENTINEL 
      
      "A mi modo de ver, la estadidad y la soberanía
      independiente son alternativas aceptables para el Congreso",
      afirmó el representante republicano por Alaska, Don Young,
      cuyo estado ingresó a la Unión en 1959. "Dado
      que 'ninguna de las anteriores' recibió la mayoría
      de los votos, planeo realizar audiencias de supervisión
      para ver qué condujo al pueblo a votar en contra de las
      únicas opciones constitucionalmente disponibles para Puerto
      Rico, que estaban en las papeletas", agregó. -CARIBBEAN
      BUSINESS 
      
      SAN JUAN, Puerto Rico. El pueblo de Puerto
      Rico está dividido. El Congreso no definirá la
      situación. ¿Cómo puede resolver Puerto Rico
      el debate -que ya lleva varias décadas- sobre el status
      político con los Estados Unidos? 
      El estancamiento cuesta tiempo, energía
      y dinero, tanto en San Juan como en Washington, y no se visualiza
      el fin para una relación política que podría
      describirse como la mayor colonia del mundo o una isla en el
      limbo. -OSCEOLA SENTINEL 
      
      No queda duda de que el prospecto de los impuestos federales
      para la elite de Puerto Rico, y no la preferencia de los electores
      por el status quo, fue lo que impidió el triunfo categórico
      de la estadidad el 13 de diciembre. Al pagar muy pocas o ningunas
      contribuciones bajo el poroso aparato de recaudaciones de Hacienda,
      el cinco por ciento más acaudalado del país sintió
      más temor por la eficiencia del Servicio de Rentas Internas
      federal que por el Estado Libre Asociado. -Miriam Ramirez de
      Ferrer, MD 
      
      "El Congreso tiene plena autoridad
      para imponer contribuciones en los territorios de los Estados
      Unidos y no hay nada especial en el ELA que pueda impedirlo.
      Pago de impuestos sin representación, es simplemente un
      slogan. No hay nada al respecto en la Constitución",
      dijo John Killian. -Robert Friedman,
      THE SAN JUAN STAR 
      
        
          
            SITIOS DE INTERNET RELACIONADOS:
            
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       El verdadero significado del resultado del
      plebiscito todavía aún no ha sido esclarecido,
      pero gracias al seminario (Puerto Rican Cultural Society of Dayton
      Symposium on Puerto Rico status) tengo una mejor perspectiva
      de porqué los votantes se manifestaron por "ninguna
      de las anteriores". 
      ¿Por qué? Ninguna de las opciones
      ofrecidas en el plebiscito de diciembre significaba un progreso
      en el status quo. Los argumentos eran los mismos de siempre,
      anticuados y poco relevantes para el mundo en que vivimos. Actualmente
      tenemos una globalización muy grande, no sólo del
      comercio sino también de ideas y de cómo y dónde
      vivir. Las fronteras entre los estados se hacen difusas mientras
      los lazos nacionales e internacionales se tornan cada vez más
      fuertes. Uno de los oradores se preguntaba si el Congreso de
      los EE.U. sólo aceptaría a Puerto Rico cuando los
      puertorriqueños se pareciesen y actuasen más como
      los americanos del continente. Pero en realidad la demografía
      indica que el continente se parecerá cada vez más
      a Puerto Rico, que incluye una mezcla de culturas, muchas basadas
      en la herencia hispana. 
      Adentrándome más, pensé
      que habría escogido la estadidad. Pero esa opción
      no parecía muy clara. El Congreso había impuesto
      limitaciones. Para complicar las cosas, el gobernador Rosselló,
      defensor de la estadidad, había pasado más tiempo
      buscando consenso en Washington que en San Juan. 
      Imponer la estadidad por medio de maniobras
      políticas podría haber funcionado en el siglo 19,
      como ocurrió en Ohio. Pero los votantes actuales son más
      sofisticados. Es esencial alcanzar primero el consenso interno
      para que Puerto Rico pueda avanzar. -Kay
      Semion, DAYTON DAILY NEWS 
      
        
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             La mejor manera de nosotros rendirle homenaje a de Hostos
            sería el que logremos lo que él propuso hace cien
            años y le fue negado en Puerto Rico por sectores políticos
            en aquel tiempo. Esto es, el que dejemos a un lado ambiciones
            personales, el partidismo, rencillas, calumnias, mentiras, miedos
            infundados y distorción de los hechos, que contaminaron
            nuestro escenario político con motivo de la consulta sobre
            status el pasado 13 de diciembre. Debemos, en vez, tener en mente
            el legado de Hostos y pensar inteligentemente para lograr una
            unidad y armonía que en un abrazo de reconciliación,
            logremos un concenso para solicitar este año al Congreso
            106 de Estados Unidos una legislación que establezca un
            proceso bajo el cual podamos votar en un plebiscito final por
            opciones de status descolonizadoras que sean viables, legítimas
            y aceptables a Estados Unidos y a la comunidad internacional...
            Pero lo que no se puede incluir en el plebiscito es una opción
            que sea el problema que tratamos de resolver como lo es
            el presente status de Puerto Rico, ni tampoco una libre asociación
            con disposiciones que sean inaceptables a Estados Unidos por
            estar fuera de su marco constitucional, como fue la opción
            de libre asociacíón en la consulta del 13 de diciembre,
            y sería la nueva definición del estado libre asociado,
            el mejor de los mundos, que ya ha sido rechazado por el Congreso
            de Estados Unidos. -Guillermo Moscoso
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      Los votantes de Arizona aprobaron, con intolerancia, una amplia
      iniciativa que prohibe a los trabajadores de ese estado usar
      cualquier otro idioma que no sea el inglés durante el
      cumplimiento de sus obligaciones laborales. 
      La Corte Suprema de Arizona declaró que la ley viola
      los derechos constitucionales de libertad de expresión
      y de igualdad ante la ley. La semana pasada, la Corte Suprema
      de los EE.UU. La Corte Suprema dejó firme la disposición
      de la corte estatal sin hacer comentarios. 
      ¿Qué más se puede decir? 
      El predominio mundial del inglés como lenguaje comercial,
      financiero y político no se verá afectado en lo
      más mínimo. Y los Estados Unidos se fortalecerán
      aún más con esa libertad. -Myriam Marquez, ORLANDO
      SENTINEL 
      
      Es necesario un plebiscito
      patrocinado por el Congreso
      Tanto el plebiscito de 1993 como el de 1998 se realizaron
      por disposición de leyes locales, luego de que se frustrara
      en el Congreso la aprobación de leyes que definieran las
      opciones disponibles para alcanzar un status permanente. 
      El plebiscito de 1998 confirma la necesidad de que el Congreso
      indague la voluntad del pueblo de Puerto Rico sobre las opciones
      que el mismo Congreso está dispuesto a considerar. Esto
      solamente puede lograrse si el Congreso patrocina un referéndum
      bajo la ley federal e informa a los votantes sobre los términos
      para la continuidad del status actual o para cambiarlo por uno
      nuevo. 
      
      La americanización para Barbosa no
      era incompatible con el patriotismo isleño, más
      bien era el instrumento vital para lograr la justicia social
      y el progreso económico. Para él, la unidad política
      con los Estados Unidos no implicaba disolver la personalidad
      cultural del pueblo puertorriqueño. La asimilación
      política no era sinónimo de asimilación
      cultural. Estaba convencido que la lengua de Calderón
      podía coexistir con la de Shakespeare creando así
      un pueblo más educado y dinámico. -Gonzalo F. Cordova
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