Lo que parecía la idea más estúpida después del Día de las Elecciones en Puerto Rico, se ha convertido de repente en la más brillante. Cuando se llevan tres días "completando el escrutinio de votos" de la carrera para gobernador en el Día de las Elecciones, ha quedado cada vez más claro que procede un recuento completo de los votos.
Cuando el 3 de noviembre la Comisión de Elecciones Estatales (CEE) certificó de forma preliminar el escrutinio de votos en las elecciones gubernatoriales, con solo algo más del 98 por ciento de los votos escrutados, Aníbal Acevedo Vilá del Partido Popular Democrático tenía una ventaja de 3.880 votos sobre el aspirante a La Fortaleza del Partido Nuevo Progresista, Pedro Rosselló.
Quedaban unos 30.000 votes, medio disputados, pendientes de escrutar, más que una oportunidad para que cambiara la ventaja. Parecía eminentemente razonable completar el recuento y sumar el tanteo antes de pasar a un recuento completo.
Pero desde el Día de las Elecciones, ha quedado claro que probablemente tendría lugar un recuento completo. Lo cual es posible debido a que cualquier candidato tiene la oportunidad de pedirlo si el margen de la carrera es de 0,5 por ciento o menos del voto global, lo cual en este caso son 9.000 o 10.000 votos. Ante las cartas que hay sobre la mesa, nadie espera que uno de los candidatos gane por más de la cantidad que concedería a cualquiera de ellos un recuento a petición según la ley electoral local.
Esta es la razón por la cual la CEE anunció en un principio que llevaría a cabo un recuento y una contaduría final de los votos del Día de las Elecciones al mismo tiempo. Parecía absurdo en ese momento, pero eso era antes de que el actual proceso en marcha hubiera comenzado.
Aunque los tres partidos han estado de acuerdo con el plan, el PPD presentó una queja formal durante el fin de semana citando la ley electoral local y argumentado que se debería acabar con los resultados del Día de las Elecciones antes de iniciar un recuento. El Presidente de la CEE, Aurelio Gracia, dijo que prefería el plan original, pero accedió a la petición del PPD, diciendo que sus argumentos estaban basados en la ley, y aceptó terminar el escrutinio del Día de las Elecciones antes de completar el recuento.
Solo unos cuantos distritos de San Juan han sido escrutados desde el lunes. Lo cual no se debe solo a que se están contando 30.000 papeletas adicionales, si no a que se están volviendo a comprobar las hojas de conteo en los centros electorales como parte del proceso. Ya que aparentemente están llenos de errores matemáticos, en muchos casos, las cajas de papeletas se están volviendo a abrir y se vuelven a contar. El promedio en el recuento de cajas de votaciones que se han comprobado hasta ahora en los centros electorales oscila entre el 20 por ciento y el 60 por ciento de todos los votos.
En esencia, se está produciendo un recuento parcial a la vez que se termina el escrutinio del Día de las Elecciones. Casi la mitad de esas 30.000 papeletas son papeletas con el nombre añadido a mano y cada una de ellas ha de verificarse para garantizar que el votante está debidamente inscrito y no ha votado en otro sitio, lo cual también está alargando el proceso.
Las actuales estimaciones calculan que la duración del actual proceso será de tres semanas. Lo cual significa que el recuento completo no podrá comenzar hasta finales de noviembre o principios de diciembre. Aunque la CEE todavía cree que podrá terminar el recuento antes de Navidad, esto añadirá no obstante otro mes a la incertidumbre que rodea la presente elección. En lugar de en Acción de Gracias, ahora los puertorriqueños probablemente no sabrán hasta Navidad quien será su próximo gobernador.
Mientras que el PPD tiene la ley de su parte, cualquier fundamento moral que apoye su argumento se está desintegrando rápidamente bajo sus pies.
Los responsables del PPD primero argumentaron a favor de completar el escrutinio sobre la base de que la ventaja de Acevedo Vilá se ampliaría con un margen suficiente de forma que no sería necesario un recuento. Ahora dicen que la ventaja podría cambiar día a día, pero no cambiará por más de un par de cientos de votos al final del repaso de las hojas de conteo. La actual tendencia rebate esto (Rosselló había acortado la delantera de Acevedo Vilá en unos 80 votos después de tres días de escrutinio).
Ahora el mantra del PPD es que no tiene porqué haber un recuento. No es algo automático. Tiene que ser solicitado de acuerdo con la ley. Y Rosselló no lo pide, dicen los responsables del PPD. La actual comprobación de las hojas de conteo es suficiente. Se trata de un proceso fiable.
"¿Por qué presiona el PNP para que se lleve a cabo un recuento cuando este es un proceso mucho más rápido y fiable?" El Comisionado Electoral del PPD, Gerardo Cruz, dijo a los reporteros. "Ahora hemos abierto aproximadamente un 20 por ciento de las cajas, pero un recuento implicaría abrirlas todas y recontar cada uno de los votos".
Cuando se le preguntó si el PPD optaría por no pedir un recuento si perdía la delantera durante la revisión de las hojas de conteo, Cruz dijo: "Se trata de algo que Acevedo Vila tendrá que decidir".
El PNP ha dejado claro desde la noche de las elecciones que quiere un recuento. Es un derecho del partido según la ley, e incluso podría verse como un acto de negligencia ante sus seguidores si declinase pedirlo.
Durante toda esta semana, los líderes el partido han estado atacando a Gracia por aceptar el plan del PPD de separar los dos procesos. Y han estado amenazando con presentar una demanda federal contra la CEE con el fin de interrumpir la revisión y conseguir que se inicie de inmediato un recuento completo.
Finalmente el PNP presentó su demanda el jueves, con lo que se pretende detener la revisión de las hojas de conteo y las reuniones del comité de transición entre la administración Calderón y el equipo de Acevedo Vilá. Argumenta, con razón, que es necesario un recuento total de votos para determinar quien será el próximo gobernador.
Ahora el PNP debería evitar que los funcionarios, como el comisionado electoral, Thomas Rivera Schatz, lancen algunos de sus más virulentos ataques verbales contra Gracia.
Se trata de un estilo político que la mitad de Puerto Rico, unos cuantos más o menos, rechazaron en las encuestas cuando votaron en contra de Rosselló. Y en gran parte se trata de la razón por la cual el PNP se ha quedado corto, hasta ahora, en la carrera gubernatorial.
John Marino, Editor Gerente de The San Juan Star, escribe la columna semanal Reporte de Puerto Rico para el Puerto Rico Herald. Su dirección de e-mail es: Marino@coqui.net |